Esta historia se trata de una bicicleta y un molino en la misma pieza para cumplir un noble fin.
Es el invento de tres creativos emprendedores. Mauricio Donemberg, Amadeo Sabattini y Mario Postay lograron darle forma a ReciU, una startup de triple impacto cordobesa que permite reciclar al mismo tiempo que se realiza una actividad física. De esta forma se logra promover el cuidado de la salud y el medio ambiente.
Mario considera que los programas de reciclado no llegan a buen puerto porque no consideran la cuestión logística. Por eso, “teníamos que encontrar un producto que permitiera moler el plástico lo más cerca posible del punto de consumo”. La inversión inicial fue de 250 mil dólares y exigió tres años de ingeniería buscando desarrollar el primer producto.
Por su parte, Gaspar Donemberg -asistente comercial de la empresa- observó que mover botellas de plástico para luego reciclarlas genera contaminación con el combustible que utiliza el camión para trasladar el material. “Esta bicicleta fija tiene un molino. Eso permite que insertes una botella y salga completamente triturada en 30 segundos o menos”, explicó.
El material que sale del proceso es materia prima que permite continuar con el camino del reciclado. Puede ser utilizado para crear lo que sea. Las estaciones de reciclado tienen cestos para acumular ese plástico y cuando se llenan, pasa un reciclador local y los retira.
“Esta bicicleta fija tiene un molino. Eso permite que insertes una botella y salga completamente triturada en 30 segundos o menos”
Gaspar mencionó un segundo producto del emprendimiento, las Eco Station. Dijo que son puntos de reciclado que se colocan en lugares de alto flujo de gente, como una universidad, plazas o barrios cerrados. El objetivo es que cualquiera que pase por ahí pueda llevar su botella, reciclarla en el momento mientras hace ejercicio.
“Todos estamos convencidos de que queremos reciclar, principalmente los niños y niñas. Pero las herramientas no son siempre útiles. Esta es una forma para que la gente se sienta parte del proceso. Para los chicos es un juego con el que se aprende”, comentó.
Según los cálculos del original emprendimiento, 180 toneladas de PET se incorporan al mercado de Córdoba, y con la bicicleta que recicla esperan recuperar entre 50 y 100 toneladas mensuales de ese escalofriante número.
ReciU está en Córdoba y Buenos Aires. Y también en Uruguay. El producto despertó interés en Chile, Venezuela y Canadá. “Estamos muy felices por eso”, admitió Gaspar.
Mario está orgulloso de la invención que responde a temas relevantes de la vida. Dijo que esta idea “es cosa de emprendedores locos que tienen ganas de dejar una huella en el mundo, aportando a un problema vital para el futuro de la humanidad. Además…nos divierte innovar”.